Hoy ha sido increible mi viaje al trabajo. cuando piensas que lo has visto todo, alguien o algo te vuelve a sorprender y te demuestra que la frase "virgencita que me quede como estoy" es una máxima a la altura de los pensamientos de Platón.
Y es que después de llegar a las 8:10 a la parada del autobús. He tenido que esperar hasta las 8:40 para que llegara uno. como siempre el grupo de espabilados estaban esperando agazapados para saltarse las normas de educacion y civismo y colarse sin esperar su turno. Un dia voy a explotar y le voy a prender fuego a más de uno.Me he metido el último. No entraba nadie más. O eso creia yo.EStabamos esperando a que cerraran las puertas cuando ha llegado un menda por detrás, y me ha embestido con su cebolleta, que gracias a Dios que tenia los calzoncillos, el pantalón y el abrigo puesto.
Menos mal que he llegado A LAS 9:30!!!
Evidentemente me he girado en cuanto ha cerrado las puertas. Mi cuerpecito no habría podido aguantar 50 minutos a "ese ritmo".
Despues de esta traumática experiencia estoy pensando en comprarme un coche y calentar globalmente, pero con mi integridad varonil intacta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario